Minuta Agropecuaria | 8 May 2023
Incluir a los productores en el proceso digital, es uno de los retos más desafiantes que tienen el sector agroalimentario en Venezuela, según opinó Luigi D’Alvano, director de tecnología e innovación de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios (Fedeagro), quien cree que la gran utilidad de la tierra va a estar en aquellas personas que conozcan y hagan sustentable la producción.
Precisamente, esa sustentabilidad va de la mano de las herramientas tecnológicas que, incluso, permite al productor ver desde la distancia, el desarrollo de su cultivo.
«El productor ha entendido la importancia que tienen las nuevas herramientas. La agricultura de precisión es una agricultura sencilla, que lo que busca es disminuir la variabilidad en los rendimientos y, a partir de ahí, hacer un uso más adecuado de los recursos. Debemos aplicar aquello que realmente se requiere para lograr no solo eficiencia económica sino también un mejor manejo del ambiente», dijo.
El experto considera que Venezuela atraviesa por lo que denomina un «mosaico tecnológico», ya que en el campo conviven artefactos, máquinas e implementos, «pero también bueyes arando y eso en algunos lados tiene mucho sentido, pero también tenemos personas haciendo monitoreo de su cultivo por satélite, que sería pasar de la agricultura 1.0 a la 4.0», explicó.
D’Alvano aseguró que la tecnología incorpora a la nueva generación, lo que es importante para el impulso y el desarrollo del sector. “Estas nuevas herramientas tanto de electrónica de precisión como de agricultura de datos, que es lo digital, conecta con la nueva generación y qué importante es que se agreguen con más competencia y más cariño por lo nuestro. Eso es hacer país», comentó.
El también líder de la Ruta de la Soya, agregó que las experiencias con el cultivo leguminoso han dejado grandes conocimientos para el futuro.
«En el país no se sabía inocular y hoy día ya lo sabemos. Hay un grupo de productores que saben hacerlo y otros que también enseñan. Venezuela tiene un gran potencial para crecer en soya», afirmó.
El especialista aseguró que la soya no compite con el maíz, porque éste es un cultivo de rotación. “Más bien, es un aliado. Si siembro soya, le dejo un nitrógeno al maíz que viene después. Sin soya es difícil que el maíz llegue a niveles de competitividad».
De igual manera, señaló que la soya también es una alternativa para la rotación de arroz, por lo que reiteró el potencial de siembra de esta leguminosa que aporta proteína a la alimentación de la población. “Tenemos las prácticas listas, sabemos lo que hay que hacer en occidente, sabemos cuáles son los obstáculos. También sabemos en qué cosas le pedimos al sector de ciencia y tecnología que nos apoye; escúchennos y déjennos trabajar”, agregó. (Mireya Mireya Moya)