La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), pidió acciones urgentes para enfrentar las fuertes lluvias que se esperan en América Latina y el Caribe en lo que resta del año, a raíz del fenómeno climático La Niña.
Se prevé que La Niña provocará graves consecuencias para la seguridad alimentaria en todo el mundo, sobre todo en África austral y oriental, América Latina y el Caribe, y también el sudeste asiático.
Los últimos pronósticos apuntan a precipitaciones superiores a lo normal entre septiembre y diciembre, pero que pueden persistir hasta marzo de 2025 en el norte de Suramérica (Colombia y Venezuela), América Central (El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua) y el Caribe (Cuba, Haití, República Dominicana).
En Cuba, Haití y la República Dominicana, las previsiones apuntan a un alto riesgo de inundaciones y ciclones en los próximos meses. Se espera que estos peligros provoquen anegamientos, daños a los cultivos, a los barcos y equipos pesqueros y al ganado, también debido al aumento de plagas y enfermedades.
Si bien el aumento de las precipitaciones que traerá La Niña puede ser beneficiosos para la agricultura en algunas zonas, también puede provocar graves inundaciones, suelos anegados, enfermedades de los cultivos y mortalidad animal.
La Niña es un fenómeno climático caracterizado por el enfriamiento de las aguas del Pacífico central y oriental, que altera los patrones climáticos globales. Ocurre cada dos a siete años y dura entre nueve y 12 meses.