Nuevas estructuras del gobierno no han podido levantar la producción nacional

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Minuta Agropecuaria.-

El Plan Zamora, la Gran Misión Agrovenezuela y el Plan Nacional de Siembra y Producción son sólo algunas de las iniciativas, planes y decretos que han sido ejecutados por el Gobierno nacional para combatir la tan promocionada «Guerra Económica» y levantar la producción. Pero, ninguno ha logrado resultados favorables para el país.

Ante ese panorama, el Gobierno venezolano se  planteó la creación de nuevas estructuras que permitieran elevar los números de lo hecho y producido en la nación, tal como lo muestra el informe de Implementación del Plan de Seguridad Alimentaria y Nutricional (SAN) de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac), publicado este año.

En ese sentido,  en el 2016 se establece el Plan Nacional Agro Venezuela 2016 y se crean los ministerios sobre agricultura y pesca: Producción Agrícola y Tierra, Pesca y Acuicultura, Agricultura Urbana.
Estos nuevos organismos anteriormente inmersos en el extinto Ministerio de Agricultura y Tierras (MAT), de acuerdo al texto, tienen el propósito de  elevar la producción de rubros vegetales, animales, pesqueros y acuícolas, en 25% para 2016 y en 80% para 2018.

Asimismo, el Gobierno de Nicolás Maduro en febrero de 2016 creó el Plan Agroproductivo Zamora Bicentenario (Zamora 200), el cual cuenta con más de 470.569 hectáreas, 97 unidades de producción socialista agroalimentaria, 135 casas de cultivos, 2 fundos zamoranos, 114 granjas piscícolas y 66 granjas camaroneras, con un total de 414 unidades productivas, en el territorio nacional donde participan la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, conjuntamente con el Ministerio de Agricultura Productiva y Tierras, el Ministerio para la Pesca y la Acuicultura y el Ministerio para la Agricultura Urbana y el Ministerio para la Defensa.

Toda esta estructura intergubernamental no es mas que otro desacierto del Gobierno nacional, tomando en cuenta la situación actual del campo venezolano que no avisora un buen futuro a corto plazo y  menos el logro de los números planteados.

En el caso de la producción vegetal, cuya competencia es del Ministerio de Agricultura Productiva y Tierras, dirigido por el ex gobernador de Portuguesa, Wilmar Castro Soteldo, son más las quejas que llueven en su gestión que los logros, ya que de acuerdo a los productores durante su gestión como mandatario regional no logró levantar la producción en la entidad, cuya principal actividad económica es la agricultura.

Aunado a ello, el sector vegetal también se ha visto afectado por la falta de insumos por la monopolización de las empresas distribuidoras, las cuales pasaron a manos del Estado con la expropiación de la desaparecida Agroisleña.
Rubros como maíz, arroz, café y caña de azúcar no ven luz en los últimos cuatro años, pues reportan caída en las áreas de siembra por carencia de insumos y embates climáticos. Años atrás, Venezuela   logró el autoabastecimiento y en áreas como arroz pudo importar este cereal. Sin embargo, la realidad actual es que ninguno de estos llega a cubrir el 20% de la demanda nacional.

En el área de la pesca y acuicultura, los números no son tan desfavorables como en la producción  vegetal, a pesar de tener un comportamiento bien variado en cuanto a producción se refiere. Este despacho esta dirigido por el Almirante Orlando Maneiro, el cual tiene como meta producir sólo este año 500.000 toneladas, objetivo bastante comprometido para cumplir, ya que la producción del 2016 de acuerdo a las cifras del ministerio fue de 284.000 toneladas.

Entre tanto, el despacho de Agricultura Urbana y Periurbana, dirigido por el Freddy Bernal, quien desde llegada de Chávez ha ocupado decena de cargos dentro de la administración pública, tiene como fuerte elevar una producción inexistente y ejecutar los tan publicitados huertos organopónicos, hidropónicos, familiares y los gallineros verticales que sólo se supo de ellos en los programas Alo Presidente dirigidos por el fallecido líder de la «Revolución Bolivariana», debido a que no hay cifras que sustenten una producción de los mismos.

Para la historia quedará el lema de Soberanía Alimentaría si desde el Gobierno nacional se mantiene la política de crear y crear organismos para lograr fomentar la producción, los cuales no han hecho mas  que aumentar el burocratismo dentro de la administración pública, que lejos de contribuir con el sector productor se ha convertido en obstáculo, partiendo del hecho que el Estado,siendo el único  que maneja las divisas, no le garantiza a los productores todos los insumos y herramientas necesarias para sacar el campo adelante y lograr el autoabastecimiento de materia prima y por ende garantizar alimentos  de la dieta básica del venezolano.

Siendo así, lejos esta el campo venezolano de salir adelante y poder brindar abastecimiento y dividendos a un país golpeado económica, política y socialmente que solo vive de los ingresos petroleros, los cuales han descendido en gran medida en los últimos dos años y que han generado que Venezuela incremente sus deudas externas para poder sobrevivir frente a una inflación acumulada que ya va sobre los tres dígitos. (Ramon Ballester)

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