Minuta Agropecuaria.-
El aumento de la mano de obra, aunque responde a los índices inflacionarios que atraviesa el país, atenta contra el empleo del sector agrícola. Los jornaleros también han incrementado su trabajo hasta un 600%, con mayor variación en algunos casos.
Para enero, el trabajador del campo cobraba solo 5.000 bolívares diarios y para esta fecha están cobrando 35.000 bolívares, sin incluir gastos de alimentación (desayuno y almuerzo) que el productor también debe costear.
Gerson Pavón, director de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios (Fedeagro) manifestó que el aumento ha sido notorio en los Andes y otras ciudades productoras del país.
En el caso específico de la papa se necesitan mínimo 10 jornaleros para sembrar solo una hectárea del tubérculo., al igual que para las labores de cosecha. Lo mismo para cultivar zanahoria, tomate y cebolla.
“El costo depende de las labores propias del cultivo, por ejemplo, en cebolla para siembra y cosecha se necesitan 30 trabajadores de campo, lo que indudablemente incrementa nuestros costos de producción y es un monto que los agricultores pueden costear a duras penas”, enfatizó Pavón.
Muchos de los productores han optado contratar menos jornaleros para no elevar la estructura de costos que también se ve impactada por el alto costo de los insumos.
El directivo de Fedeagro, añadió que aunado al constante incremento para producir alimentos en el país, se le suma la falta de efectivo, “lo que multiplica nuestros costos porque nos hemos visto en la necesidad de comprar efectivo pagando hasta un 60% de intereses para poder adquirirlo”, mencionó.