Pedro Raúl Solórzano Peraza
Septiembre de 2017
(Parte II)
Relación general entre crecimiento o rendimiento de un cultivo y suplencia de nutrientes
Si continuamos la dirección de la curva, se aprecia un sector donde el rendimiento es estable, no continúa aumentando a pesar de seguir aplicando dosis crecientes del nutriente, es la zona de rendimiento máximo donde aumentos en la dosis de fertilizante no originan incrementos en los rendimientos, aunque si puede aumentar la concentración del nutriente en los tejidos representando el fenómeno que se conoce como “consumo de lujo”. Finalmente, tenemos un sector de la curva en el cual los rendimientos disminuyen por efecto de las dosis excesivas del nutriente que llegan a causar algún tipo de toxicidad, y esto representa una respuesta negativa de la planta a esas altas dosis del nutriente.
Entre la zona de respuesta de la planta a la aplicación de nutrientes y la zona de rendimiento máximo existe un sector que se denomina “rango crítico”, el cual generalmente se establece entre 90 y 100% del rendimiento máximo y representa un rango de valores en el cual se debe realizar la aplicación de fertilizantes ya que por debajo estamos dejando de propiciar mejores rendimientos y por encima estamos mal gastando los fertilizantes porque podemos llegar a la zona de consumo de lujo.
Lo importante de conocer estos conceptos, es que el agricultor puede estar limitando la productividad de su cultivo porque las dosis de fertilizantes aplicadas son insuficientes y las plantas se encuentran en la zona de hambre oculta. En esas condiciones, el agricultor no se percata de la condición de mal nutrición por la que atraviesa el cultivo ya que no hay manifestación de síntomas visuales, y esto ratifica una vez más la necesidad de que se disponga de un análisis de suelo que oriente mejor hacia la recomendación de dosis adecuadas de fertilizantes. También resalta la importancia de que se realicen análisis de tejidos de plantas que van a indicar directamente su estado nutritivo, y nos permite mejorar los programas de fertilización en ciclos de cultivos sucesivos.
Recordemos que: SIN FERTILIZANTES es imposible producir la cantidad de alimentos que necesitamos para satisfacer los requerimientos de la población.