Minuta Agropecuaria.-
Cuatro socios en el campo de la salud: la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Unión Internacional contra la Tuberculosis y las Enfermedades Respiratorias, han unido sus fuerzas para desarrollar la hoja de ruta y abordar las graves consecuencias sanitarias y económicas de la tuberculosis bovina y zoonótica.
Las organizaciones iniciaron la discusión en el marco de la 48º Conferencia Mundial de la Unión sobre Salud Pulmonar que se celebra esta semana en Guadalajara (México).
La tuberculosis animal -TB bovina- y su transmisión a los seres humanos -TB zoonótica-, causada la mayoría de las veces por el consumo de carne o productos lácteos contaminados sin tratar de animales enfermos, insta a una estrecha colaboración entre aquellos que trabajan para mejorar la sanidad humana y animal. Se basa en el enfoque multisectorial de Una Salud.
“Esta hoja de ruta multidisciplinaria representa un hito en la lucha contra la tuberculosis en personas y animales”, aseguró Paula I Fujiwara, Directora Científica de la Unión. “Mejor tecnología, ciencia y gobernanza para las comunidades afectadas por la TB bovina en las zonas rurales más pobres, deben ser el nuevo mantra si queremos emprender la vía de eliminar la TB absolutamente en todas partes”.
Los últimos datos publicados por la OMS indican que más de 140 000 personas enferman y más de 12 000 mueren cada año a causa de la tuberculosis (TB) zoonótica, sobre todo en las regiones de África y del Sudeste asiático.
“Hemos avanzado para poner fin de la tuberculosis, pero en gran medida las personas con TB zoonótica permanecen olvidadas. Las prioridades señaladas en esta hoja de ruta destacan la necesidad de una acción multisectorial para combatir esta forma olvidada de tuberculosis y alcanzar las metas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU y de la Estrategia “Fin a la TB” de la OMS señaló Mario Raviglione, Director del Programa Mundial contra la Tuberculosis de la OMS. “Juntos –añadió- podemos salvar vidas y garantizar los medios de subsistencia”.