Minuta Agropecuaria | 23 Enero 2023
La caña de azúcar es un cultivo de máximo interés en Brasil, mayor productor mundial y que, según datos de la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab), cuenta con 572,8 millones de toneladas producidas para la actual campaña. Por su importancia para el país, la investigación en torno a su cultivo es clave para estudiar nuevas alternativas y oportunidades de mejora que puedan surgir.
La Corporación Brasileña de Investigación Agrícola a partir de su banco de microorganismos, identificó dos bacterias que pueden aumentar la absorción de fósforo de las plantas y que han demostrado ganancias de productividad en el cultivo de caña de azúcar. Gracias a la investigación y desarrollo de ambas cepas, crearon Omsugo ECO, que reduce la necesidad de fertilizantes fosfatados y por tanto genera ganancias económicas y mejor sostenibilidad medioambiental.
El bioinsumo producido en Brasil, es el primer inoculante solubilizador de fósforo desarrollado en el país con recomendaciones agronómicas validadas para el cultivo de caña de azúcar. Su comercialización está a cargo de la multinacional Corteva Agriscience y según los datos de la investigación, lograron una ganancia productiva de 20% en cultivos de caña de azúcar.
Las cepas de bacterias Bacillus subtilis (CNPMS B2084) y Bacillus megaterium (CNPMS B119) fueron seleccionadas a partir de las accesiones de la Colección de Microorganismos Multifuncionales y Fitopatógenos (CMMF) de Embrapa Maíz y Sorgo. La jefa adjunta de transferencia tecnológica de la unidad, Myriam Maia Nobre, explicó que «esta colección tiene un enorme potencial para ofrecer soluciones para aumentar el rendimiento de varios cultivos, centrándose en la sostenibilidad y la descarbonización de la agricultura»
Las bacterias seleccionadas forman esporas altamente resistentes al estrés ambiental, permitiendo una mejor colonización de las raíces de la caña de azúcar. Los estudios sobre su uso han probado que es compatible con las demás prácticas agrícolas realizadas en los campos.
La investigadora a cargo del estudio, Christiane Paiva, señaló que «nuestra investigación se centró en la caña de azúcar, definiendo dosis y recomendaciones de uso del inoculante Omsugo ECO para encontrar la mejor relación coste-beneficio para los agricultores. Obtuvimos informes de ganancias medias de alrededor de 12 toneladas por hectárea en las zonas donde los agricultores probaron el producto, en comparación con las zonas sin aplicación» sostuvo.