Muchos suelos presentan de forma natural elevadas concentraciones de metales pesados. Sin embargo, las actividades industriales, metalúrgicas y mineras pueden incrementar la concentración de metales pesados en el suelo.
Los metales pesados no son biodegradables y pueden permanecer en el suelo por largos periodos de tiempo. Son tóxicos para los organismos del suelo, las plantas y el ser humano. Por este motivo, el uso de técnicas respetuosas con el medioambiente para la extracción de los metales pesados de zonas contaminadas es un paso muy importante en la restauración integral de áreas degradadas.
El biochar o biocarbón se obtiene mediante un tratamiento térmico de biomasa conocido como pirólisis. Este se realiza a temperaturas entre 300-600 ℃ y en ausencia de oxígeno.
El empleo de biocarbón en el suelo es una de las tecnologías propuestas recientemente en la COP25 celebrada en Madrid para favorecer el secuestro de carbono en el suelo y de otros gases de efecto invernadero. Además, tiene otras ventajas ambientales.
La combinación de la fitorremediación con el uso de biochar o biocarbón es una técnica utilizada para extraer los metales pesados del suelo. Ha surgido con fuerza en los últimos años debido a su bajo coste comparado con otros métodos fisicoquímicos de tratamiento de suelos contaminados.
Entre otras, este material tiene las siguientes aplicaciones:
Como enmienda orgánica en el suelo.
Como sustrato de cultivo. Se reduce así el uso de turba y, por lo tanto, contribuye a la conservación de las turberas, un auténtico sumidero de carbono.
En la descontaminación de suelos.
Residuos ganaderos, fuente de biocarbón
La actividad ganadera produce casi 121 millones de toneladas de estiércol en España. Se reutiliza, principalmente, como enmiendaorgánica tras su compostaje o en la fabricación de abonos debido a su contenido en materia orgánica y nutriente.
Sin embargo, gran parte del estiércol termina en vertederos o es incinerado. De esta manera, se pierde una fuente de materias primas como el fósforo, elemento estratégico para la Unión Europea.
La adición de biochar en suelos favorece el incremento de la producción de biomasa de las especies vegetales encargadas de la descontaminación debido a la mejora de las propiedades físicas, químicas y biológicas del suelo y de su contenido en nutrientes. Está comprobado que el biochar puede aumentar en más de un 10 % la producción de biomasa.