Cosas importantes están ocurriendo en el municipio Sucre del estado Portuguesa, para la preservación de los suelos, quebradas y medio ambiente en general, además del aprovechamiento de los subproductos del café, que anteriormente eran considerados como material de desecho y hoy en día pueden ser una importante fuente de ingresos
Minuta Agropecuaria | 28 Nov 2024
El proyecto denominado “Manejo agroecológico y aprovechamiento de la pulpa de café”, surgió de una idea nacida hace varios años durante el II Congreso Nacional del Café y la Caficultura, realizado en Guanare-Portuguesa, según explica Ken Alejandro Espinoza, investigador a cargo, quien recuerda que para ese entonces su persona había estado realizando ciertas averiguaciones con respecto a la cantidad de desechos que se generan durante el procesamiento de este rubro.
“En esa oportunidad presenté mi ponencia de todos los subproductos que se podían lograr”, explicó el investigador, quien es caficultor, cacaotero, maestro campesino caficultor acreditado por la Academia de Ciencias Agrícolas, con diversos cursos de formación en varios países de Latinoamérica que tienen que ver con el manejo del café y el medio ambiente. Igualmente es formador del programa de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) “Doctores de los Suelos”.
Señaló que la idea principal y el objetivo de este proyecto es generar medios de vida sostenibles en una comunidad caficultora, como lo es la Quebrada Las Rosas, sector Palo Alzado, municipio Sucre en el estado Portuguesa, “de ahí nace el aprovechamiento de la concha dulce, que es la cascarilla del café deshidratada, que a su vez es un desecho residual, pero puede ser usada para el consumo humano, ya que es una bebida infusionada.
Lo mejor es que con esa misma pulpa se puede crear fertilizantes, composteros, biocombustible, entre otros”. “Pero ahora nos falta abrirnos en un mercado y que la producción para esta cosecha sea mayor”-
Proyecto de triple impacto
Para ello se hace necesaria el apoyo de las organizaciones internacionales, es por eso que tuvo que ser adaptado en varios aspectos, ya que para ser aprobado por el programa de Pequeñas Donaciones de las Naciones Unidas de Perú, debe cumplir con ciertos requisitos, uno de ellos es que se trate de un proyecto de triple impacto, que genere beneficios en la parte económica, social y ambiental.
“En este caso la parte social es porque se involucra a la familia caficultora, incluyendo mujeres, jóvenes y demás miembros para participar en los procesos productivos y además formativos”. Afirmó Espinoza.
Explicó que en el aspecto económico los beneficios son generales, ya que las familias participantes obtienen una plusvalía de la comercialización del café para que procesen café de calidad y a su vez aprovechen el generar subproductos para la venta.
Otro de los grandes beneficios del aprovechamiento de este subproducto es que ayuda a disminuir la contaminación de los suelos y quebradas, donde por lo regular iban a parar estos desechos. “Estamos creando conciencia entre los caficultores para que no se sigan cometiendo estos ecocidios, haciendo daño a la naturaleza, Portuguesa es uno de los principales productores de café del país y por eso es donde se genera mayor contaminación”.
Explicó que por cada kilo de café procesado se genera al menos 5 kilos de masa residual que deteriora los suelos, además que desperdician más de 20 litros de agua, “de ahí nace la importancia de utilizar procesos más ecológicos de lavado y despulpado, tratamiento de aguas residuales, uso de camas de secado solares, biocombustible sacado de los mismos residuos del café, entre otros, de ese modo nos vamos volviendo más ecológicos”.
Informó Espinoza que las comunidades participantes ya han recibido algunos equipos para trabajar con el proyecto, además que han sido formados y la única condición es que se aboquen al cuidado del medio ambiente.
Por otra parte los investigadores se encuentran en fase para que apenas abran convocatoria en el programa de las Naciones Unidas, ir al proyecto de escalamiento para continuar mejorando los procesos dentro de la comunidad.
Diferentes usos para la cascarilla del café
Asegura el investigador que en realidad son muchos los usos que se le pueden dar a la pulpa de la cascarilla del café, algunos ejemplos es que en Colombia, la convierten en material para la creación de sandalias, en Costa Rica la procesan como harina, entre otros. “Y personalmente, aunque no está en el proyecto, yo hago para mi consumo licor, además de cerveza vikinga o hidromiel, que es una mezcla de la pulpa de café, miel y agua, la cual tiene un sabor muy similar a uno de estos productos famosos del mercado”.
Igualmente comentó el caso de algunos productores que usan el llamado pergamino del café como combustible, en sustitución del gasoil, “para secar 40 kilos de café se van 200 litros de gasoil, imaginen toda la cantidad de diésel que necesitan los productores que tienen muchas hectáreas”, dijo que otros prefieren las camas solares, “pero en ambos casos es una opción más ecológica”.
Si estos cambios que se están realizando en Quebrada Las Rosas, se continúa replicando, se logrará un cambio significativo en la preservación del medio ambiente, según explica el experto, quien asegura que estos procedimientos ya están siendo adoptados por otros productores.
Los agricultores que deseen mayor información sobre este proyecto se pueden comunicar con Ken Espinoza a través de sus redes sociales @kenalejandroespinoza @aromasdeportuguesa
Reportaje escrito para nuestra 6ta edición impresa de Minuta Agropecuaria. Por: Nora Perdomo.-