Minuta Agropecuaria | 16 Enero 2024
Suizo de nacimiento, Jacobo Krummenacher llegó a Venezuela hace 54 años y desde que conoció esta tierra se enamoró de ella, como la mayoría de los extranjeros, vino a trabajar y a forjar su futuro.
Desde muy joven ha dedicado su vida a la agricultura y ganadería, permaneció 25 años junto a Concepción Quijada siendo su mano derecha y encargado de la Hacienda Choro.
Jacobo cuenta con orgullo que » en la Hacienda Choro se producían hasta 33 mil litros de leche diarios, gracias al cuidado y entrega en las vaqueras, la disciplina es la base de todo.»
Su amor por el campo siempre ha estado presente, y es en el año 2010 cuando Krummenacher decide emprender el camino en solitario dedicándose a la cañicultura, y así lo hizo hasta el 2017, cuando se vio obligado a parar, debido a la problemática para la asignación y obtención del fertilizante químico, lo que le llevó a buscar alternativas orgánicas y naturales que pudieran ayudarle a atender el cultivo de caña de azúcar.
Y así surge Suiza Tropical y la lombricultura BIO, de la mente de un señor, que bien, podría haberse retirado, pero al contrario, su determinación y amor por este país lo llevó a reinventarse.
Suiza Tropical, -un nombre que fusiona sus raíces suizas con el trópico venezolano-, es el legado que está dejando a sus 4 hijos y 6 nietos.
Está empresa ya tiene 6 años en el mercado portugueseño, produciendo Humus de Lombriz líquido y sustrato sólido, el cual es aplicado a todo tipo de cultivos.
Es un sueño ecológico convertido en una realidad, vender Humus de lombriz roja californiana, le ha permitido a Jacobo, aportar soluciones sostenibles y ecológicas al agricultor, a la tierra, cultivos y por supuesto, al consumidor final que lleva un producto sano a la mesa.
A la fecha, cuentan con 580 lechos donde las lombrices producen el Humus. «La crianza de las lombrices se parece tanto a la de las vacas lecheras por la constancia que requiere».
Así es Jacobo Krummenacher, puntual como la hora Suiza y constante como buen trabajador, a él lo podrás encontrar de lunes a domingo en Suiza Tropical ubicado en la Autopista José Antonio Paez salida sector la flecha vía Píritu- Turen km 3, cuidando a sus lombrices y supervisando el crecimiento de este proyecto.
En la actualidad, su hijo Stefan Krummenacher lo acompaña en la dirección de la empresa, juntos, aportan modernidad y evolución a este concepto BIO, que no para de crecer.
Jacobo Krummenacher es un amante de estas tierras y algo que dice con mucha determinación es que nunca se irá de Venezuela, porque para él es el mejor país del mundo.
Katiuska Pérez Mirás.-