Ing. Agr. M. Sc. Werner Gutiérrez Ferrer
Profesor y Ex Decano de la Facultad de Agronomía de LUZ
@WernerGutierrez
Son infinitas las oportunidades que posee Venezuela para la producción de proteína animal dentro del sector acuícola, pero sin duda, en el caso específico del camarón, nuestro país, y muy particularmente el estado Zulia, ha demostrado condiciones excepcionales para su cultivo, por disponer de 365 días al año de temperaturas ideales para el cultivo en sus aguas continentales, y en el Lago de Maracaibo, que oscilan de 26 a 34 grados centígrados con una concentración de sales de 4 a 6 partes por millón; una excelente ubicación geográfica que le permite el fácil acceso a mercados tan demandantes de este alimento como Estados Unidos de Norteamérica, Canadá, Asia, Europa y México, y contar con un sector empresarial y profesional privado que ha construido una industria prospera y de amplio futuro.
El cultivo comercial del camarón en Venezuela comienza a finales de la década de los años 90 con alrededor de 8 unidades de producción activas, consolidándose como actividad económica importante entre los años 2006 – 2015 con 32 granjas dedicadas a su producción y comercialización principalmente fuera de nuestras fronteras. En la actualidad existen 38 empresas con aproximadamente 12.0 mil hectáreas de piscinas distribuidas en los estados Trujillo, Anzoátegui, Sucre, Nueva Esparta, Mérida, Falcón y Zulia, de las cuales alrededor de 11.0 mil hectáreas se ubican en el occidente, principalmente en el estado Zulia, y una menor proporción en Falcón.
Es oportuno resaltar que pese a la difícil situación económica venezolana, empresarios nacionales continúan impulsando de manera decidida a este sector estando en desarrollo 16 nuevos proyectos que nos permitirán alcanzar cerca de las 16.0 mil hectáreas, superando de manera significativa, la producción anual actual de 27.0 mil toneladas de camarón.
La camaronicultura nacional cuenta con doce plantas procesadoras en nuestro territorio, siete de la cuales están ubicadas en la región occidental con una capacidad instalada de 350.0 mil kilogramos por día, y las situadas en el extremo este del país, de 50.0 mil kilogramos por día. Actualmente la producción nacional de alimentos balanceados para camarón es de cerca de las 40.0 mil toneladas por año, formulados principalmente con materia prima importada, no obstante la capacidad de procesamiento instalada sobrepasa las 180.0 mil toneladas. En
conjunto se estima que la industria dedicada a la cría, engorde, procesamiento y comercialización del camarón genera sobre los 87.0 mil empleos directos e indirectos en Venezuela.
En el horizonte se vislumbra un elevado crecimiento de la camaronicultura venezolana, bajo el liderazgo del sector empresarial zuliano, expresando todo el potencial que posee nuestra nación para el desarrollo de este sector alternativo generador de divisas y que ha demostrado compartir la riqueza obtenida, impulsando el bienestar de las zonas rurales del país.
Para permitirle al sector camaronero nacional expresar el infinito potencial que posee es indispensable el acompañamiento del estado venezolano en sus diferentes instancias. Es urgente el cese de imposiciones tributarias arbitrarias;, excesivo burocratismo que entorpece y retrasa los procesos de permisología, de exportación del camarón y la nacionalización de materias primas; el suministro oportuno de combustibles y del servicio eléctrico; garantizar la seguridad jurídica y personal; mejorar las vías de comunicación y el funcionamiento de puertos marítimos y aeropuertos, y el generar políticas públicas que corrijan los desequilibrios económicos y fiscales.
De garantizar un ambiente propicio las proyecciones a futuro en Venezuela indican que en el período 2019 al 2024 puedan ser incorporadas aproximadamente 2.500 nuevas hectáreas cada año para alcanzar una producción estimada de 60.0 mil toneladas anuales, llegando a nuevos mercados como China, Turquía, Rusia y Japón.
Estamos conscientes de la magnitud de los grandes retos asumidos. La Asociación de Productores de Camarones de Occidente (ASOPROCO), con sede en Maracaibo, lideriza un equipo de empresarios y profesionales de avanzada,
que han asumido a través de la consolidación de alianzas estratégicas con instituciones nacionales e internacionales la tarea de implementar programas de formación, capacitación y actualización del talento humano fundamental para sostener e incrementar la productividad y eficiencia de esta industria.
Igualmente se trabaja en la incorporación de recursos tecnológicos de primer nivel que permitan continuar llevando el camarón venezolano a los mercados internacionales y la conquista cada año de nuevos destinos, así como en la
compleja labor de alcanzar las certificaciones internacionales de mayor prestigio de nuestra industria, y el lograr la “marca país” del camarón venezolano, símbolo inequívoco del prestigio de nuestro producto en cualquier parte del mundo.
La diversificación vegetal del sistema camaronero venezolano es también tarea pendiente, para ello un grupo de Ingenieros Agrónomos liderizamos la conformación de un equipo multidisciplinario de profesionales, para de la mano de ASOPROCO, presentar en los próximos meses ante organismos de financiamiento internacional un proyecto que viabilice la siembra y procesamiento agroindustrial de cultivos de alta demanda en la industria farmacológica, cosmetológica y de alimentos para consumo humano y animal, establecidos bajo prácticas de manejo agroecológicas en las granjas camaroneras de la cuenca del Lago de Maracaibo, contribuyendo a sustituir importaciones y generando fuentes adicionales de ingreso de divisas al país.
Pocas regiones del país poseen las infinitas ventajas que muestra el estado Zulia para iniciar desde sus espacios la urgente e indispensable labor de recuperar la producción de alimentos y asumir el papel de guiar la construcción de la Venezuela agroexportadora, permitiéndonos romper para siempre la dependencia del petróleo como casi única fuente generadora de divisas a la economía venezolana. El sector camaronero regional nos ha indicado el camino con notable éxito, indispensable es el sumar voluntades a favor de esta iniciativa.